Cartavio ( 23 - 3 )El hampa volvió a hacer de las suyas ayer. Resulta que una peligrosa banda de delincuentes, que opera bajo la modalidad de la extorsión, quemó un ómnibus de la empresa de transporte interprovincial Señor de los Milagros, que cubre la ruta Trujillo - Cartavio.
Para cometer el atraco, los sujetos, fingiendo ser pasajeros, abordaron el vehículo de placa UD 2503 alrededor de las 7.15 p.m.; luego, con sus armas de fuego y lanzando insultos y amenazas de muerte, desvalijaron a todos los ocupantes y obligaron al chofer a que se desvíe de la vía hacia unos campos de caña, donde finalmente lo rociaron con gasolina y lo incendiaron.
Juan Jacinto Rivas (34), conductor del bus, relató que los hampones subieron en la localidad de Chicama.
“Eran cinco sujetos que no aparentaban ser delincuentes. En realidad parecían trabajadores de alguna fábrica, pero cuando llegamos al cruce de la carretera Panamericana con la vía que va a Cartavio, se pararon de sus asientos y nos amenazaron a todos con sus armas… a los pasajeros les dijeron que entreguen sus celulares y dinero”, contó Jacinto. Una vez con el efectivo y los aparatos en su poder, los sujetos ordenaron que todos bajen.
“Luego, me llevaron una zona totalmente oscura por unos sembradíos de caña… allí me golpearon en la cabeza”.
En aquel lugar desolado, los facinerosos bajaron raudamente del bus y sacaron de entre las plantas el combustible.
“Al parecer, los galones los habían dejado allí desde antes… parecía que ya todo lo tenían planeado. Allí, en medio de la nada, cubrieron el ómnibus con la gasolina y luego lo prendieron”, añadió el conductor.
¡S/. 5 MIL DE INICIAL!
Según contó Jacinto, en todo momento los sujetos le decían “esto porque el dueño no nos ha pagado los 5 mil soles que le hemos pedido”.
En efecto, parientes de Matías Toribio Ticlia, el dueño de bus siniestrado, señalaron que los delincuentes le venían exigiendo el pago de esa cantidad de dinero como una inicial.
“A parte de ese dinero, tenía que darles 50 soles mensuales por unidad. Y esa amenaza no solo se la hicieron a él, sino al resto de empresas que van a Cartavio”, relató un familiar de Toribio.
Luego de prender el vehículo, los delincuentes huyeron de la escena en un vehículo que esperaba por ellos cerca del lugar.
Las llamas, de otro lado, dejaron reducido el bus a chatarra. Los bomberos controlaron el incendio tras una ardua labor.
Vale resaltar que el caso ha dejado honda preocupación en todo Cartavio, donde la gente se apostó anoche en la comisaría pidiendo mayor trabajo por parte de la Policía.
“Estamos indefensos ante la delincuencia. Esta es la cuarta vez que incendian un ómnibus en el valle Chicama, y no hemos visto ninguna acción drástica por parte de las fuerzas del orden para frenar esta incontrolable ola de extorsiones. Además, los asalto ocurren a diario”, expresó Felipe Santiago Cerna García, alcalde de esa localidad.
Para cometer el atraco, los sujetos, fingiendo ser pasajeros, abordaron el vehículo de placa UD 2503 alrededor de las 7.15 p.m.; luego, con sus armas de fuego y lanzando insultos y amenazas de muerte, desvalijaron a todos los ocupantes y obligaron al chofer a que se desvíe de la vía hacia unos campos de caña, donde finalmente lo rociaron con gasolina y lo incendiaron.
Juan Jacinto Rivas (34), conductor del bus, relató que los hampones subieron en la localidad de Chicama.
“Eran cinco sujetos que no aparentaban ser delincuentes. En realidad parecían trabajadores de alguna fábrica, pero cuando llegamos al cruce de la carretera Panamericana con la vía que va a Cartavio, se pararon de sus asientos y nos amenazaron a todos con sus armas… a los pasajeros les dijeron que entreguen sus celulares y dinero”, contó Jacinto. Una vez con el efectivo y los aparatos en su poder, los sujetos ordenaron que todos bajen.
“Luego, me llevaron una zona totalmente oscura por unos sembradíos de caña… allí me golpearon en la cabeza”.
En aquel lugar desolado, los facinerosos bajaron raudamente del bus y sacaron de entre las plantas el combustible.
“Al parecer, los galones los habían dejado allí desde antes… parecía que ya todo lo tenían planeado. Allí, en medio de la nada, cubrieron el ómnibus con la gasolina y luego lo prendieron”, añadió el conductor.
¡S/. 5 MIL DE INICIAL!
Según contó Jacinto, en todo momento los sujetos le decían “esto porque el dueño no nos ha pagado los 5 mil soles que le hemos pedido”.
En efecto, parientes de Matías Toribio Ticlia, el dueño de bus siniestrado, señalaron que los delincuentes le venían exigiendo el pago de esa cantidad de dinero como una inicial.
“A parte de ese dinero, tenía que darles 50 soles mensuales por unidad. Y esa amenaza no solo se la hicieron a él, sino al resto de empresas que van a Cartavio”, relató un familiar de Toribio.
Luego de prender el vehículo, los delincuentes huyeron de la escena en un vehículo que esperaba por ellos cerca del lugar.
Las llamas, de otro lado, dejaron reducido el bus a chatarra. Los bomberos controlaron el incendio tras una ardua labor.
Vale resaltar que el caso ha dejado honda preocupación en todo Cartavio, donde la gente se apostó anoche en la comisaría pidiendo mayor trabajo por parte de la Policía.
“Estamos indefensos ante la delincuencia. Esta es la cuarta vez que incendian un ómnibus en el valle Chicama, y no hemos visto ninguna acción drástica por parte de las fuerzas del orden para frenar esta incontrolable ola de extorsiones. Además, los asalto ocurren a diario”, expresó Felipe Santiago Cerna García, alcalde de esa localidad.
