BAJEZA
Chicama ( 25 - 3 ) Una menor de edad formuló ayer una grave denuncia contra el jefe del programa del Vaso de Leche de la municipalidad de Casa Grande, César Augusto Alayo Cabrera. La muchacha, de iniciales A. L. O. H. (17), asegura que Alayo le dio un poderoso somnífero para provocarle el sueño y luego abusar de ella.
Según la denuncia que puso la agraviada ante la Policía de esa localidad del valle Chicama, el funcionario edil le dio de beber un vaso de yogurt, presuntamente mezclado con el tranquilizante.
Luego de terminarse hasta la última gota de la bebida, se quedó profundamente dormida y a merced de los bajos instintos de Alayo.
El caso ocurrió días atrás en el domicilio de este trabajador municipal, ubicado en el barrio Mariscal Castilla.
De acuerdo con el relato de la menor, ella trabajaba para Alayo como empleada doméstica desde hacía apenas 6 días.
Asimismo, comentó que, tras recobrar la conciencia, se percató de lo que su nuevo patrón le había hecho, por lo que le reclamó su actitud.
Dijo también que, ya por la noche, tuvo que contarles a sus parientes lo que le había sucedido en casa de Alayo. Lo hizo en medio de un llanto irreconciliable.
María Huaripata, madre de la joven, se mostró indignada con la situación y decidió denunciar el caso en la comisaría de Casa Grande.
Los agentes de esa dependencia policial asumieron los primeros trabajos de investigación, en coordinación con el Ministerio Público.
Al cierre de edición, la víctima era sometida a riguroso exámenes físicos y sicológicos en el médico legista, para determinar la veracidad de la denuncia.
MANIOBRA POLÍTICA
Por su parte, César Augusto Alayo Cabrera, el acusado, afirmó que la denuncia en su contra responde a una maniobra política de sus detractores para sacarlo del camino. Vale precisar en este punto que él, como aprista, es secretario del Comité Ejecutivo Electoral del Apra en Casa Grande.
“Estamos a puerta de un proceso electoral, y para ser sincero, todo se puede esperar en estas épocas, incluso ataques de mis propios compañeros… por eso no me sorprende la denuncia”, aseveró.
De igual modo, Alayo descartó que la versión de la muchacha sea cierta, y dijo que se someterá a todas las pruebas que la Fiscalía requiera.
“Soy inocente, y una prueba de ello es que sigo aquí, en mi despacho en el programa Vaso de Leche, trabajando de lo más normal. Es más, no he contratado abogado para que me defienda porque no me van a hallar culpable de nada… no tengo nada que ocultar”, puntualizó
De otro lado, explicó que conoció a la menor durante las visitas que hace a diario a los distintos clubes de madre de la localidad.
“Fue allí donde me pidieron que le dé trabajo, y yo de buena fe se lo di… ahora pago las consecuencias de ello”, finalizó.
Chicama ( 25 - 3 ) Una menor de edad formuló ayer una grave denuncia contra el jefe del programa del Vaso de Leche de la municipalidad de Casa Grande, César Augusto Alayo Cabrera. La muchacha, de iniciales A. L. O. H. (17), asegura que Alayo le dio un poderoso somnífero para provocarle el sueño y luego abusar de ella.
Según la denuncia que puso la agraviada ante la Policía de esa localidad del valle Chicama, el funcionario edil le dio de beber un vaso de yogurt, presuntamente mezclado con el tranquilizante.
Luego de terminarse hasta la última gota de la bebida, se quedó profundamente dormida y a merced de los bajos instintos de Alayo.
El caso ocurrió días atrás en el domicilio de este trabajador municipal, ubicado en el barrio Mariscal Castilla.
De acuerdo con el relato de la menor, ella trabajaba para Alayo como empleada doméstica desde hacía apenas 6 días.
Asimismo, comentó que, tras recobrar la conciencia, se percató de lo que su nuevo patrón le había hecho, por lo que le reclamó su actitud.
Dijo también que, ya por la noche, tuvo que contarles a sus parientes lo que le había sucedido en casa de Alayo. Lo hizo en medio de un llanto irreconciliable.
María Huaripata, madre de la joven, se mostró indignada con la situación y decidió denunciar el caso en la comisaría de Casa Grande.
Los agentes de esa dependencia policial asumieron los primeros trabajos de investigación, en coordinación con el Ministerio Público.
Al cierre de edición, la víctima era sometida a riguroso exámenes físicos y sicológicos en el médico legista, para determinar la veracidad de la denuncia.
MANIOBRA POLÍTICA
Por su parte, César Augusto Alayo Cabrera, el acusado, afirmó que la denuncia en su contra responde a una maniobra política de sus detractores para sacarlo del camino. Vale precisar en este punto que él, como aprista, es secretario del Comité Ejecutivo Electoral del Apra en Casa Grande.
“Estamos a puerta de un proceso electoral, y para ser sincero, todo se puede esperar en estas épocas, incluso ataques de mis propios compañeros… por eso no me sorprende la denuncia”, aseveró.
De igual modo, Alayo descartó que la versión de la muchacha sea cierta, y dijo que se someterá a todas las pruebas que la Fiscalía requiera.
“Soy inocente, y una prueba de ello es que sigo aquí, en mi despacho en el programa Vaso de Leche, trabajando de lo más normal. Es más, no he contratado abogado para que me defienda porque no me van a hallar culpable de nada… no tengo nada que ocultar”, puntualizó
De otro lado, explicó que conoció a la menor durante las visitas que hace a diario a los distintos clubes de madre de la localidad.
“Fue allí donde me pidieron que le dé trabajo, y yo de buena fe se lo di… ahora pago las consecuencias de ello”, finalizó.
